Puede que la biotecnología se traduzca en la venta de menores volúmenes, pero de productos más eficaces, asegura experto
Madrid, España. – “El futuro de los fertilizantes pasa por la biotecnología, para que la planta coma mejor y más eficientemente”, afirmó Juan Pardo, presidente de la Asociación Comercial Española de Fertilizantes (Acefer).
Durante una entrevista en el marco del 3er Congreso sobre Fertilización, Pardo explicó que, “en fertilización va desde lo más simple, desde cómo activar y mejorar la flora microbiana del suelo para que las plantas ‘coman’ mejor hasta las modificaciones genéticas de los cultivos para que mejoren su nutrición”.
La biotecnología puede que se traduzca en la venta de menores volúmenes, pero de productos más eficaces, opinó.
Puso de ejemplo a la Asociación Comercial Española de Fertilizantes (Acefer), empresa distribuidora de fertilizantes con 65 asociados, cuenta en su portafolio con productos como la urea y los compuestos químicos inorgánicos y, en menor medida, los organo-minerales y los bioestimulantes.
Esta compañía, ha decidido que solicitarán ser uno de los “certificadores” de productos fertilizantes autorizados.
Pardo mencionó que la nueva legislación española pretende estimular el “reciclado de residuos industriales y urbanos para el crecimiento de las plantas”. También recordó, al referirse a los residuos ganaderos, que “ya se reciclaban en el campo sin esta normativa”.
En su opinión, el futuro de la fertilización no dependerá tanto del nuevo reglamento como de “hacia dónde va el mundo”, y el sector, “cada día más profesionalizado y tecnificado”, no dejará de vender “lo que necesita la planta: nitrógeno, fósforo, potasio, micronutrientes y microelementos”.
“Ahora el sector está en la fase de que la planta coma mejor, y que no se desperdicie ni contamine con emisiones a la atmósfera; esa es su apuesta, ya que, en contra de algunas acusaciones, estamos cuidando el medio ambiente”, expresó.
Insistió en que “la mayor consumidora de CO2 es la agricultura” y los mayores productores no son el campo ni los fertilizantes, sino industria, automóviles o calefacciones”, entre otros.
En cuanto a comercialización, tras un primer semestre de 2019 con menores consumos de fertilizantes (en parte por la sequía en el cereal, que acapara entre el 60 y 70% de las ventas), “el actual arranque de la siembra, que empieza con unos agricultores que tienen menos dinero, puede estar sujeta a una disminución de demanda”.
“A pesar de esta circunstancia, pronostico que, si el otoño viene bien, con lluvia, y buena siembra, los agricultores seguirán fertilizando igual que en otras campañas”, afirmó Pardo.
Con información de: EFE Agro