De acuerdo con la Sader, este proyecto contribuyó entre marzo y lo que va del año, a asegurar la producción del ciclo de riego 2022 en los estados de Sinaloa, Sonora, Chihuahua, Baja California, Coahuila, Durango y Zacatecas.
Redacción Guía Agroindustrial
México. – De marzo de 2021 a la fecha, el proyecto “Estimulación de lluvias” logró mitigar los efectos de la sequía en 98 por ciento de los seis polígonos de estimulación donde se puso en marcha, con lo que se aseguró la producción agrícola de riego y temporal en los estados de Sinaloa, Sonora, Chihuahua, Baja California, Coahuila, Durango y Zacatecas, destacó el titular de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), Víctor Villalobos Arámbula.
Asimismo, el funcionario señaló que esta iniciativa –operada a través de la Comisión Nacional de las Zonas Áridas (Conaza), con el apoyo de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM)– incrementó los volúmenes de captación en presas y permitió combatir al menos 25 incendios forestales.
En un comunicado, el funcionario recordó que la precipitación de lluvia permite el crecimiento de alimento para el ganado, la siembra de cultivos de temporal y se monitorea la entrada de agua a las presas.
Respecto al almacenamiento de las presas, Villalobos Arámbula destacó que en los seis proyectos regionales se registraron variaciones desde 55 hasta 65 por ciento. La contribución a la recarga de acuíferos como el de Laguna de Mexicanos en Chihuahua fue de prácticamente 90 por ciento.
Indicó que el esquema –puesto en marcha por primera vez en el país— fue un éxito ya que contribuyó a mitigar los efectos de la sequía en 98 por ciento y aseguró la producción agrícola de riego en los proyectos regionales que cubren 40 por ciento de la superficie nacional de los distritos de riego y 33 por ciento de las unidades de riego del país, asegurando la producción de alimentos.
En este contexto, señaló que la agricultura de riego fue diez veces más eficiente que la de temporal para reducir la amenaza de la falta de alimentos que se avizoraba, debido a que las presas de almacenamiento se encontraban históricamente en niveles muy bajos de su capacidad al inicio de la temporada de lluvia.
Recordó que este proyecto operó con éxito en Baja California durante febrero y marzo pasados, en una extensión de un millón de hectáreas que comprenden el poblado de San Vicente y la zona agrícola de San Quintín.
Por otra parte, agregó que en abril pasado mediante una operación coordinada con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), se realizó la aspersión de yoduro de plata en las nubes sobre municipios de Nuevo León y Coahuila para generar lluvias y contribuir a los trabajos realizados por las autoridades civiles y militares en el combate a un incendio forestal.
El principal objetivo de la Conaza –que comprenden nueve millones de hectáreas de zonas áridas–, es el aumento de cobertura vegetal con relación a la condición inicial, pues ya se observan matorrales y pastizales que servirán para la ganadería extensiva, así como la captura de carbono y la conservación de la biodiversidad