En caso de existir alguna alerta sanitaria que involucre a productos con el sello TIF, se puede hacer el rastreo del producto o trazabilidad para prevenir consecuencias mayores, así como determinar la fuente del problema, permitiendo corregir y prevenir futuros eventos.

Por redacción Guía Agroindustrial

 Ciudad de México. – La certificación y el Sistema Tipo Inspección Federal (TIF) que se identifican a través del sello TIF en los productos cárnicos y huevo, incluidos los de valor agregado, dan certeza al consumidor de que se cumple con los más altos estándares de calidad e inocuidad desde la producción primaria y en todos y cada uno de los procesos, aseguró Alonso Fernández Flores, presidente de la Asociación Nacional de Establecimientos Tipo Inspección Federal (Anetif).

En el marco del Día Mundial de la Inocuidad Alimentaria –conmemorado el 10 de junio y cuyo lema fue «Inocuidad de los alimentos: preparémonos para lo imprevisto»– apuntó que en caso de existir alguna alerta sanitaria que involucre a productos con el sello TIF, se puede hacer el rastreo del producto o trazabilidad para prevenir consecuencias mayores, así como determinar la fuente del problema, permitiendo corregir y prevenir futuros eventos.

Asimismo, mencionó que la pandemia de COVID-19 marcó un antes y un después en la forma de enfrentar los retos para garantizar la inocuidad en los alimentos; por ello, Anetif analizó la mejor forma de acoplarse a la situación que trajo la pandemia, pues si bien varias actividades fueron suspendidas como medida para evitar contagios, la producción de alimentos fue una excepción.

“Es indudable que las condiciones de los mercados cambiaron, hay países que implementaron mayores exigencias, por lo cual el principal reto de Anetif ha sido buscar el apoyo de las autoridades para promover la modernización del sistema TIF a través de sus instrumentos legales, con la finalidad de permitirle al sector cárnico la posibilidad de ser más competitivo con otros mercados, permitiendo que se haga uso de nuevas tecnologías, sin que esto implique un incumplimiento a la normativa”, señaló Fernández Flores.

Recordó que los productos TIF son los únicos elegibles para exportación ya que cuentan con el respaldo de un proceso sistematizado que tiene registros detallados y exactos de cada producto, ya que el sistema es reconocido por diferentes países.

Entre las tecnologías para garantizar la inocuidad, mencionó el uso de CO2 y luz pulsada UV en la conservación de alimentos, que ayudan a extender la vida útil de los productos sin usar conservadores que pudieran afectar su calidad, permitiendo así llegar a otros mercados más lejanos sin necesidad de que exista congelación.

Además, destacó el uso de softwares especializados para mantener la trazabilidad de los productos; técnicas de envasado con atmosfera controlada; el uso de envases funcionales activos que evitan la proliferación de microorganismos; así como innovación en diseño higiénico para promover la reducción del uso de detergentes y desinfectantes, reduciendo de esa manera el impacto ambiental.

En un comunicado, el Anetif destacó que mediante el Organismo de Certificación de Establecimientos TIF (Ocetif), se ofrecen certificaciones a los socios así como la implementación de nuevas tecnologías y sistemas de inocuidad y calidad alimentaria, a través de la red de patrocinadores y certificaciones internacionales que son requeridas para ser más competitivos en los mercados.

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