El control biorracional no es solamente un término “tendencia”, es una toma de conciencia acerca del cuidado de nuestra salud.
Por Rommel Madrigal Ramirez*
Recientemente, publiqué en redes sociales lo siguiente: “El concepto que teníamos de ‘matar’ a una o varias especies, por completo, de un cultivo, sin respetar la biodiversidad, ya quedó en el pasado; ahora mediante el control biorracional se busca dejar vivir a más especies sin que estas rebasen el umbral económico, protegiendo al cultivo e integrando diferentes moléculas amigables con el medio ambiente, que tienen métodos de acción a través del control biológico y el control mecánico, dejando gradualmente de utilizar pesticidas altamente residuales”.
Me llamó mucho la atención el comentario de un seguidor, quien señalaba que en el argot agronómico no se utiliza el término “matar”, ya que en su lugar utilizamos el término “controlar”. En efecto este verbo utilizado de forma elegante y en sentido figurado en mi publicación va mas allá de la semántica si lo contextualizamos en el sentido que, al controlar una especie de ser vivo considerado agronómicamente como plaga (mamífero, insecto, bacteria, hongo, etc.), terminamos por destruir y extinguir colateralmente a especies gracias a las cuales se crea la vida.
Como nos recuerda el maestro Luis Raúl García, especialista en abejas y docente de la Facultad de Zootecnia y Ecología de la Universidad Autónoma de Chihuahua, “las abejas son de total importancia para el mundo, ya que de ellas depende el 60% de la polinización mundial; el otro 40% lo polinizan otros insectos, pájaros, inclusive corrientes de aire, sin embargo, sin las abejas, en un aproximado de 5 años el planeta se quedaría sin vida”.
Así que tomemos en cuenta que el control biorracional no es solamente un término “tendencia”, es una toma de conciencia acerca del cuidado de nuestra salud.
Llegando a este punto se preguntarán lo siguiente: ¿cómo hacer para comenzar con una buena estrategia de control biorracional? ¿Puedo disminuir la carga de pesticidas en mi sistema de producción o establecer un plan de manejo gradualmente hasta, por qué no, llegar a que mi cultivo sea libre de pesticidas?
Para ello, es preciso conocer siguientes fundamentos.
Las plantas tienen su propio sistema de defensa
De manera similar al sistema linfático de los seres humanos, el sistema inmune de una planta entra en acción cuando agentes externos ingresan a su sistema vascular mandando señales de alerta para producir fitoalexinas, llegando incluso hasta auto sacrificar células para expulsar estos agentes que causan enfermedades de su sistema.
Las plagas no atacan a las plantas sanas
Una teoría ampliamente comprobada por el Dr. Thomas Dykstra, experto entomólogo y CEO de Dykstra Laboratories, Inc., en Gainesville, Florida (EU), concluye que los insectos no atacan a los cultivos con una adecuada nutrición, expresado esto en el contenido de fotosintatos de la planta. Es posible hacer monitoreos constantes durante todo el ciclo fisiológico a bajo costo con la ayuda de un refractómetro para calcular el nivel de azúcar (grados Brix) en la savia de cada planta.
Esta teoría viene a revolucionar y transformar lo que erróneamente pensábamos: que las plagas atacan a las plantas mas suculentas y vigorosas, así como dejar hacer el trabajo solamente al pesticida sin pensar que únicamente subiendo –mediante nutrición y bioestimulación– uno o dos grados brix en la planta, a ciertos insectos plaga no les apetecerá el tejido dulce.
Pues bien, con base en estos fundamentos, puedo sugerir algunas prácticas para comenzar con una buena estrategia de control biorracional.
Integra, mezcla o combina
En tu siguiente aplicación integra insumos certificados de origen biológico o botánico; estos tienen un modo de acción diferente al convencional y en su gran mayoría otorgan mayor poder al pesticida sintético.
Existen muchas alternativas en el mercado; por ejemplo, productos formulados con sales potásicas y/o jabones potásicos, cuya acción mecánica hidrolizante impacta en la quitina del cuerpo blando de los insectos, ya que una vez que la piel es desgastada por la reacción súper alcalina, los activos del pesticida –sintético o botánico– penetran con mayor rapidez en el sistema del insecto.
Lee el artículo completo en la más reciente edición de Agro Orgánico: https://agroorganico.info/ediciones-digitales/
* CEO Organica Solutions. https://organicasolutions.com.mx/