La incorporación de estos productos se realiza con base en la actualización de los Lineamientos para la Operación Orgánica de las actividades agropecuarias

Redacción Guía Agroindustrial

Ciudad de México. – La miel melipona y productos acuícolas han sido incorporados en los procesos de certificación orgánica, lo que beneficiará a más de 50 mil productores orgánicos, principalmente de mediana y pequeña escala, informó la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader).

En un boletín de prensa, la dependencia apuntó que la incorporación de estos productos se realiza con base en la actualización de los Lineamientos para la Operación Orgánica de las actividades agropecuarias, que entró en vigor el pasado diciembre.

Al respecto, durante la videoconferencia “Acuerdo por el que se dan a conocer los Lineamientos para la Operación Orgánica de las actividades agropecuarias”, el director de Inocuidad Agroalimentaria del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), José Luis Lara de la Cruz, explicó que los nuevos lineamientos buscan ampliar la oferta de productos orgánicos en México y consolidar la confianza de los consumidores, al mismo tiempo que posicionan a los productos mexicanos en los mercados nacional e internacional.

Por su parte, la subdirectora de Autorización y Aprobación de Organismos de Coadyuvancia del Senasica, Aurora Lobato García, explicó que una de las modificaciones más relevantes es la excepción que se establece para la producción no ligada al suelo, que permitirá la certificación de contenedores, que incluyan en su plan orgánico información técnica en materia de sustratos y uso de plásticos clorados.

Respecto a la acuacultura, comentó que los organismos interesados en certificar la producción acuícola, deberán presentar una solicitud ante el Senasica, ya que se trata de un sistema productivo nuevo y requiere competencias técnicas especializadas, diferentes a los sistemas pecuarios que ya operaban.

En materia de etiquetado, informó que se hicieron precisiones para dar la opción al productor y procesador de incluir la leyenda “Libre de organismos genéticamente modificados” o “Producido sin OGM”.

Otra innovación relevante, apuntó, son los criterios para inspección y certificación, en los que se incluyó un apartado de análisis de riesgo para que las inspecciones estén dirigidas a hacer más eficiente el trabajo de los organismos de certificación, sin que ello implique mayores costos para los operadores.

Estos análisis permiten clasificar las operaciones en función del riesgo de perder la integridad orgánica, ya sea por factores de producción, por los insumos utilizados o por riesgos en el procesamiento y la comercialización.

En la videoconferencia organizada por el Senasica participaron productores, operadores, procesadores, fabricantes de insumos, comercializadores, sistemas de certificación orgánica participativa, organismos de certificación, entidades de acreditación y representantes de Estados Unidos, Canadá, la Unión Europea y de la Comisión Interamericana de Agricultura Orgánica (CIAO), integrada por 19 países.

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